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sábado, 6 de junio de 2015

EDUARDO RUBIANES


LA ESQUINA:              MI, NO COMPRENDER



            Amigos: “El azar no existe, Dios no juega a los dados. (Albert Einstein). “ Con e ruido de la guerra no oigo el de las leyes”. (Cayo Mario). “ La palabra Progreso no tiene ningún sentido mientras haya niños infelices” (Albert Einstein).  Una vez pasadas las elecciones, tenemos la segunda parte del estreno nacional,  los pactos, se trapichea con los anhelos, con la buena fe de los que votaron, se comercia sin compasión con los dineros de los demás, y lo que es peor,  no se tiene en cuenta para nada, el beneficio del pueblo que les dio el poder para realizarlo, tan solo que no es poco, buscan la mejora personal y de su partido político, y aquí incluyo a todos. A los de la casta, a los casposos, y al  ultimo de la fila. Para comer cerillas encendidas.  Un circo, un espectáculo de aves de rapiña, que se matan por su trofeo, por la carnada del poder. Esto que os digo amigos, no es tan solo que yo lo diga aquí, lo decís la mayoría viendo tal espectáculo circense. Aquí solo trasmito la voz del pueblo en su mayoría, por supuesto. Bochornoso. Si es cierto que el pueblo así lo eligió, también es cierto que al ser humano se le doto de inteligencia y del habla, y como ser grupal, necesariamente deben dialogar para llegar a todo tipo de negocios, y acuerdos sin que intervenga violencia alguna, aunque a veces, no lo realicen de esa guisa. Desde los albores de la humanidad, podemos constatar, miles y miles de batallas guerras, violencia suprema entre esos seres humanos dotados de habla e inteligencia. Pero lo que es aun peor. Hoy en día en pleno siglo XXI se sigue la misma tónica, cuando las cosas se tuercen un ápice, y la voluntad de diálogo humana se convierte en instinto,  y surgen las declaraciones de guerra. Y se lleva a cabo, y perecen cientos de miles de seres humanos, llevados, arrastrados, por un par de imbéciles que no sabían dialogar primando sus intereses cuasi egoístas y ególatras en aras de una libertad, que lleva a genocidios,  y desastres sin fin. Sabiendo además que eso va a ocurrir así, llevando a sus pueblos al engaño y a la trampa. Hay casos como el nuestro, que no llegaremos a esta crueldad, aunque a veces una palabra  malsana cause mas herida que un afilado cuchillo toledano. Y en este unto estamos. Queridos amigos lectores. Yo te doy, tu que ofreces, un condado y mil maravedíes,  un palacio con carroza y diez caballos cubiertos de oro. Esto parece Alicia en el país de las maravillas, bajo la óptica de los sueños, porque la realidad es muy dura, para todos. Bueno… para casi todos. Estos que juegan al Monopoly, con los dineros de los demás, no se enteran, no sienten, no padecen,  ellos a lo suyo, tirar los dados, y a ver que sale, y vuelves a tirar, y menos mal que se dialoga, en muchas ocasiones es un dialogo de sordos, es decir, pronuncian dos mil palabras para decir no me llega, quiero más.  A decir verdad también tiene su mérito,  lo digo, porque hay que tener manga ancha y bolsillo estrecho, para trapichear con la voluntad ajena, y encima decir que es por el pueblo, por el ciudadano. Por el bien de la comunidad. Mi no comprender, y desde luego mi  no aceptar tamaño mercadeo. Los verdes se juntan con los negros, y los azules con los rojos, y los pequeños amarillos, se quedan compuestos y sin jugar.  Desde luego para masticar ladrillos,  el mercadeo de voluntades y dineros ajenos, es una jauja.  Mi no comprender. Un saludo amigos. Saude e terra.                                                            Fdo. Eduardo JJ Rubianes Calvo      

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